Prueba a pintar el mundo,
coge un pincel y elige el
color más preciso para
cada momento.
Con cada trazo de color
marcarás un instante en
la vida. Con cada imagen
reflejada un sueño por cumplir.
Coge el pincel, cierra tus ojos
y déjate llevar por tu intuición,
crea tu mundo, añade tus colores
y elimina el negro constante y
apagado que surge tras un
conglomerado de miedos.
Haz que aparezca el blanco y
que un solo rayo de luz lo destroce
en infinitas partes, formando un
arco iris de grandes colores.
Porque tu eres un ser compuesto,
comprometido con la vida y cada
parte de ti como cada color existente
tiene algo que ofrecer, haz explotar tus
virtudes y deja que el mundo se
apiade de ellas.
Podrás llegar a formar el dibujo más
perfecto que puedas imaginar,
podrás llegar a mostrar la obra
maestra más grande de todos los
tiempos, el propio ser humano.
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